Sociedad de Grandes Logias en Alianza - SOGLIA.

soglia shield mLa Sociedad de Grandes Logias en Alianza fue fundada como cuerpo suplementario de Logias Masónicas Regulares. Estas Logias están autorizadas y gobernadas por las autoridades de su Gran Logia correspondiente. Cada uno de nuestros miembros es, y debe permanecer como, miembro en buenos términos de una Logia existente dentro de una Gran Logia reconocida. Nuestras organizaciones mantienen que los principios masónicos, según definidos por las Grandes Logias, son fundamentals, más que discrecionales, sirviendo como la piedra angular sobre la cual expandimos para iluminar aún más nuestro camino.

Como cuerpo suplementario del sistema de Grandes Logias, nuestras Grandes Logias operan de manera consistente con los principios básicos de la Francmasonería. Implícito en estos principios está que nuestros miembros deben ser vistos como hombres buenos, esforzándose continuamente por mejorarse a sí mismos, su carácter y sus acciones, para que colectivamente podamos ejercer una influencia positiva y benévola en el mundo en general.

Creemos que los principios masónicos que guían la vida de nuestros miembros han sido comprobados, a lo largo de los siglos, para mejorar su carácter y perspectivas. Como Masones u organizaciones masónicas, nuestro fracaso en alcanzar los estándares excepcionalmente altos de conducta esperados de nosotros es casi siempre el resultado de nuestro fracaso en entender o aplicar los principios masónicos que nos han sido enseñados. Cuando no cumplimos con los estándares de conducta requeridos de los Masones, nuestra respuesta es corregir y remediar ese fracaso, no rebajar nuestros estándares.

Reconocemos que todos los seres humanos son falibles y que, a veces, las acciones de un miembro pueden caer por debajo de las altas expectativas de nuestra Fraternidad. Además, reconocemos que, en esos casos, las Logias, las Grandes Logias y nuestras propias organizaciones pueden, por necesidad, estar obligadas a investigar y, dentro de las prácticas establecidas, tomar las acciones disciplinarias apropiadas contra los Hermanos individuales. Apoyamos estas acciones, en la creencia de larga data de que tales esfuerzos resultarán en una mejora tanto en el individuo como en nuestra Fraternidad en general.

Nuestro interés en adherirnos a los principios masónicos se relaciona no solo con mejorar a nuestros miembros, sino también específicamente con continuar disfrutando de una reputación sobresaliente por integridad y servicio dentro de nuestras comunidades.

La Francmasonería como sociedad se caracteriza por ser:

Caritativa: sus recursos se dedican al bienestar y la felicidad de la Humanidad. Benévola: cree que el bien de los demás es de preocupación primordial. Comunitaria: promueve la conducta ética y actitudes responsables entre sus miembros, y actitudes de corazón y mente que les ayudarán a practicar la caridad y la buena voluntad hacia todos.
Educativa: sus ceremonias autorizadas enseñan un sistema de moralidad y fraternidad basado en la Verdad Universal.
Reverente: reconoce a un Ser Supremo, Creador del Universo al que todos los hombres deberían reverenciar. El Volumen de la Ley Sagrada está abierto siempre que una Logia esté en sesión y es un recordatorio constante de ese deber fundamental.
Social: fomenta el encuentro de hombres con el propósito de camaradería, instrucción y caridad.

Para estos varios fines:

Enseña: y defiende la reverencia ante el Ser Supremo; la verdad y la justicia; la fraternidad y la benevolencia práctica; una actitud de mente abierta y la libertad del individuo, civil, religiosa e intelectual.

Encomienda: Se espera que cada miembro mantenga fidelidad y lealtad a las leyes del gobierno al que le deben lealtad y que cumpla con las leyes y regulaciones de cualquier estado en el que residan.

Cree: que estos objetivos se logran mejor reconociendo una base amplia sobre la cual los hombres de cada raza, país y opinión puedan unirse. La adopción de una plataforma restrictiva que no esté basada en el verdadero valor humano es inaceptable para la Francmasonería.

Sosteniendo estas creencias, y con el conocimiento de que el verdadero Masón actuará en la vida civil de acuerdo con su juicio individual y los dictados de su conciencia. Las Grandes Logias de SOGLIA reafirman su compromiso con el principio de la Francmasonería de larga data y aprobado, que prohíbe el debate de credos, políticas u otros temas que puedan provocar conflictos personales o desacuerdos religiosos durante las reuniones masónicas.

Su dedicación: - a esos principios masónicos básicos de amor fraternal, ayuda y verdad; y mediante su práctica constante, la disminución del conjunto de sufrimiento humano y la promoción de la verdadera y duradera felicidad de la Humanidad.

Su convicción: - de que no sólo es contrario a los principios fundamentales de la Francmasonería, sino también peligroso para su unidad, fuerza, utilidad y bienestar, que los cuerpos masónicos tomen medidas o intenten ejercer presión o influencia a favor o en contra de cualquier legislación, o de cualquier manera intenten conseguir la elección o nombramiento de funcionarios gubernamentales, o influir en ellos, sean o no miembros de la Fraternidad, en el desempeño de sus funciones oficiales.

Exclusivamente para hombres: - Si bien las parejas y familias están involucradas en la Francmasonería, y son muy importantes para nuestra organización, sólo los hombres pueden postularse para ser Masones. Cada uno de nuestros miembros es y debe seguir siendo, miembro en buenos términos de una Logia existente dentro de una Gran Logia reconocida.

S.O.G.L.I.A.
Sociedad de Grandes Logias en Alianza